Los doctores obesos abordan menos el tema:

Los médicos con kilos de más hacen "vista gorda" de la obesidad

Según un estudio, el diagnóstico y tratamiento de este problema de salud en un paciente puede depender del peso de su doctor.

Cristián M. González S.
Aquello de enseñar con el ejemplo no se cumple entre los médicos con sobrepeso u obesidad: según un estudio de la Universidad Johns Hopkins, en EE.UU., el volumen corporal del médico incide en cuánto empeño pone en diagnosticar esta condición y en advertir a sus pacientes sobre los peligros de ser obeso. Así, los doctores con kilos de más tienden a hablar menos de obesidad en su consulta.

A través de una encuesta realizada a 500 médicos de atención primaria, los investigadores observaron que, en comparación con los facultativos obesos o con sobrepeso, aquellos con un Índice de Masa Corporal (IMC) normal eran más propensos a entablar con sus pacientes obesos un diálogo sobre el peso (el 30% frente al 18%) y a diagnosticarlo como obeso si perciben que el IMC del paciente es similar o excede al propio (93% frente al 7%).

Para el estudio, los médicos que dijeron tener un IMC por debajo de los 25 kg/m2 fueron considerados como de peso normal; los que estaban por sobre ese valor fueron clasificados como personas con sobrepeso u obesidad.

"Los resultados fueron totalmente sorprendentes", dijo la doctora Sara Bleich, de la Escuela de Salud Pública de la universidad y autora del estudio, que está basado en una investigación previa que encontró que los médicos que fuman advierten menos de los riesgos de este hábito a sus pacientes.

Para el psicólogo Fernando Urra, de la Universidad Central, no es extraña esta conducta. "Aunque existen protocolos internacionales sobre lo que se debe consultar o sugerir en una evaluación clínica, el médico lo hace según sus intereses. Y si se siente cómodo con su imagen corporal, por ejemplo, eso no va a ser tema".

Pese a ello, la doctora Bleich plantea que "esto levanta muchas preguntas. Creo que este comportamiento no es del todo intencional y que hay mucho de subconsciente. Lo que este estudio sugiere es que los atributos físicos de los médicos tienen mayor incidencia de lo que se pensaba sobre el cuidado de sus pacientes".

Imagen y confianza

Por ejemplo, los médicos con un IMC normal tienen una mayor confianza en su capacidad para proporcionar consejos sobre dietas y ejercicio. No así los médicos excedidos de peso, quienes en cambio tienden a prescribir más fármacos por sobre cambios en el estilo de vida (26% versus 18%). Para la autora, esto puede ser reflejo de una fallida experiencia personal con esos métodos.

Un aspecto que incide en el éxito de un eventual tratamiento.

El doctor Attila Csendes, cirujano del Hospital Clínico Universidad de Chile, estima que esta manera de actuar tiene relación con una suerte de bloqueo mental por parte del especialista que padece una condición de salud en particular. "No ve el problema como propio y lo evita. Pero como el paciente ve al doctor es determinante, y se sabe que eso es parte del 50% del éxito de cualquier intervención".

Así no es raro que surja desconfianza por parte del paciente. "Si veo a un médico obeso recetando un tratamiento para adelgazar es poco creíble", comenta.

"La relación médico-paciente es ante todo una relación afectiva; no es posible atender si no hay un tipo de vínculo, como la confianza", agrega el psicólogo.

A pesar de las directrices existentes para los médicos sobre cómo aconsejar y tratar a los pacientes obesos, estudios previos han encontrado que sólo un tercio de los pacientes con sobrepeso u obesidad recibe recomendaciones de tratamiento de los especialistas a quienes consultan.

"La independencia de un médico para tratar a pacientes obesos más allá de su propio IMC, mejorará el bienestar y la calidad de tratamiento de la obesidad", conluye Bleich.

Publicado el 31/01/12
Fuente: El Mercurio


Contacto: contactenos@adelgace.cl
Celular: +569 7497 6497 / Santiago de Chile