¡Dile adiós a las anticipadas arrugas! Mira estos tips
Es muy recomendable tener una alimentación saludable y cultivar buenos hábitos para ostentar no sólo una buena figura, sino también un cutis sano y lo menos agrietado posible. Para que nuestra cara no parezca un mapa que nos agregue años de más, toma nota sobre los siguientes datos proporcionados por una especialista.
Nadie puede evitar el paso de los años, y el elixir de la eterna juventud forma parte de la inaprensible fantasía. Tampoco podemos deshacer nuestra herencia genética que tanto nos predispone a la forma en que nuestro cuerpo cambia con el transcurso del tiempo.
Cuando hablamos de cronoenvejecimiento aludimos al proceso natural en que la piel pierde elasticidad durante los años. En ese sentido, aceptar las arrugas como el trazado cutáneo de nuestra historia es algo inteligente desde el ámbito emocional, pero también es acertado tomar medidas para evitar el deterioro y envejecimiento prematuro de nuestra piel, causados por factores externos (tales como el sol y el cigarro), pues involucra a nuestra salud en general.
Primer requisito: Bella durmiente
La relevancia de dormir bien atraviesa todos los ámbitos de la salud, y su influencia en una buena apariencia es indudable. El requisito básico que ha sido repetido hasta el hartazgo es la necesidad de dormir, en promedio, ocho horas. Sin embargo, algunos recomiendan posturas para dormir que alejen a las terroríficas arrugas.
“Se supone que uno debería dormir con una almohada relativamente planita, pensando en las arrugas del cuello. Tampoco está tan demostrado, es bien controversial”, señala la doctora Irene Araya, dermatóloga del Hospital Clínico de la U. de Chile, quien asegura que existen muchos mitos urbanos al respecto.
Mujer santiaguina
El Gran Santiago se destaca por su aureola de esmog y clima “agresor”, factores que deben ser muy considerados. “Yo diría que hay tres puntos fundamentales: limpieza, humectación y fotoprotección, porque este es un clima súper seco y frío. No hay nada peor que eso”- asegura la dermatóloga.
Por ello, lo recomendable es lavarse la cara dos veces al día: después de levantarse y en la noche, para sacarse el maquillaje y toda la suciedad acumulada durante la jornada. Aún así, la dermatóloga hace un alcance y asegura que “eso depende del paciente, de la edad, del tipo de piel, si tiene una patología de piel, etc.”
En cuanto a la humectación, no se trata de tomar cien vasos de agua al día, pero sí preocuparse de hidratarse con líquido (o con alimentos que contengan agua) y cremas. Es importante aclarar que el nivel de hidratación depende de la particularidad de cada persona. En términos generales, el consumo promedio de agua debe ser de dos litros al día. El uso de cremas para la cara y el cuerpo depende del tipo de piel del individuo.
“Después de la ducha es el mejor minuto para humectarse la cara y el cuerpo”, asevera la especialista, quien aconseja-en caso de no disponer de tiempo al madrugar- realizar la humectación tras un baño nocturno, para dormir humectada y sin necesidad de realizar esta operación en la mañana siguiente.
En cuanto a la fotoprotección, la doctora Araya resalta el determinante papel desempeñado por el bloqueador solar durante todas las estaciones del año. La especialista explica que “aunque estemos en invierno, hay sol, y éste produce manchas y fotoenvejecimiento. Qué decir si va a la nieve, porque es igual a ir a la playa”.
Y es que el sol se ha posicionado como uno de los factores más agresivos para nuestra piel. Por ello, la exposición descontrolada al sol y el uso de artefactos como el solárium, si bien entregan un sensual bronceado, tienen un efecto nocivo que más vale prevenir.
No olvidemos que en la capital estamos muy irradiados por el sol, y los rayos UVA son los principales responsables de las manchas y envejecimiento de la piel (a veces, del cáncer), mientras que los rayos UVB son carcinógenos, y su hora peak es al medio día. Por lo tanto, los 365 días del año deberíamos embetunarnos con bloqueador cada mañana, y repetir este procedimiento varias veces al día (al menos tres), sobre todo en verano.
En la temporada invernal, si bien se recomienda su uso, hay que tener criterio. Si pasas encerrado durante todo el día en una oficina y sales cuando ya está oscuro, bastará sólo en la mañana, antes de salir.
Dieta saludable para una cara bonita
La importancia de la alimentación siempre es capital, inclusive para la belleza. Gran parte de los chilenos tiene una alimentación basada en grasas saturadas, lo cual fomenta la aparición de surcos y pliegues en la piel.
Por ello, se debe priorizar el consumo de determinados nutrientes- tales como los carotenoides, ácidos grasos omega-3 y vitaminas-, los cuales tienen una función fotoprotectora, es decir, resguardan a la piel del daño externo que la envejece, y por tanto, se convierten en un “ejército anti-arrugas” comestible.
El grupo de los carotenoides está integrado por la zanahoria, tomate, melón, mango, damasco, durazno, espinaca, repollo, lechuga, brócoli, entre otros. Su función fotoprotectora convierte a estos vegetales y frutas en grandes aliados de la piel, y lo mejor es su accesibilidad, ya que se encuentran en cualquier feria o supermercado.
Publicado el 29/08/12
Fuente: Terra