Los adolescentes de California consumen menos calorías en la escuela
Los estudiantes de las escuelas secundarias de California, un estado que controla la venta de comida chatarra en las máquinas expendedoras escolares, consumen menos calorías que los alumnos de los estados sin esa norma.
"Quedamos muy satisfechos con las diferencias, en especial en las calorías y el azúcar", dijo Daniel Taber, autor principal del estudio y profesor de la University of Illinois, en Chicago.
El estudio no demuestra que los estudiantes estén reemplazando los alimentos poco saludables con los saludables, pero la ley de California "fue un primer paso" para mejorar la dieta de los adolescentes, consideró Patricia Crawford, profesora de la University of California, en Berkeley, quien no participó del estudio.
Hace varios años, California dispuso que los productos que las escuelas ofrecían en las máquinas expendedoras o por otros medios fuera del almuerzo no aportaran más de 250 calorías (no más del 35 por ciento a través de grasas y hasta el 35 por ciento de su peso de azúcares agregados).
El equipo de Taber comparó el consumo diario de esos productos entre alumnos de California y de 14 estados sin esas limitaciones escolares.
El estudio, publicado en Archives of Pediatrics and Adolescent Medicine, incluyó información de más de 100 estudiantes de California y de unos 560 alumnos de otros estados obtenida durante la primera mitad del 2010.
Los adolescentes de California consumían 158 calorías diarias menos que el resto de los participantes, principalmente porque ingerían menos calorías durante las horas escolares.
Aunque el estudio no analizó cómo la dieta de los adolescentes influía en su salud, "una diferencia de 158 calorías ayuda mucho a evitar el sobrepeso, en especial si el nivel de actividad física es el adecuado", dijo Taber.
Los estudiantes de California también ingerían 17 gramos menos de azúcar que el resto, pero no necesariamente optaban por los alimentos más saludables.
Los participantes consumían la misma proporción de vitaminas y minerales. "Todos los estados podrían lograr que las escuelas ofrezcan productos más saludables, además de prohibir los alimentos y las bebidas ricas en grasa, azúcar y calorías", indicó Taber.
El autor comentó que aunque otros estados habían tomado medidas en esa dirección, California fue el más ambicioso en esos términos. "Debería recibir un aplauso por sus medidas. Aun así, la lección es que sus leyes son recién un punto de partida", señaló.
El Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA, por su nombre en inglés) está elaborando los estándares federales para los alimentos que se le podrán ofrecer a los alumnos en las máquinas expendedoras o en los comedores escolares.
Crawford consideró que el estudio es un buen primer paso en el análisis de los efectos alimentarios de las leyes de California.
"Me alegra que hayan dado el primer paso para conocer los beneficios nutricionales. Y porque existen esos beneficios, debemos avanzar", finalizó.
Publicado el 13/07/12
Fuente: Terra