¿Quieres bajar de peso? Aprende a desayunar

Es la comida más importante del día, que puede marcar la diferencia en todas tus actividades. Te contamos por qué.

Después de horas de ayuno, hay quienes despiertan listas para asaltar el refrigerador, mientras que otras con suerte logran tragar una taza de café. Lo que muchas no saben es que estamos hablando de la comida más importante del día.

Aquellos que evitan comer de mañana, al andar del día se sienten con menos energía y concentración. La razón de esto es que la falta de glucosa empuja a nuestro cuerpo a quemar otras reservas energéticas, lo que causa múltiples alteraciones en el normal funcionamiento orgánico. Por otro lado, desayunar bien conlleva prácticamente puros beneficios. Diversos estudios muestran que.

- Mejora el estado nutricional, porque estamos consumiendo lo que necesitamos.

- Menos grasa en el organismo. Si el desayuno incluye tostadas, pan, cereales, galletas sencillas, etcétera, el consumo diario de grasa es menor. Ingerir estos alimentos contribuye a aumentar los aportes calóricos realizados a partir de los hidratos de carbono, reemplazando otros con mayor contenido graso.

- Fibra. Si se incluyen cereales o panes integrales, las posibilidades de satisfacer las necesidades de fibra son mayores.

- Vitaminas y minerales. Aquellas personas que no desayunan cuentan con menos aporte de hierro, calcio, magnesio y zinc, además de vitaminas.

- Control del peso. Si repartes las calorías durante el día en 4 o 5 comidas, ninguna de ellas estará sobrecargada, lo que permite además evitar la comida a deshora.

- Rendimiento físico e intelectual. Debido a cambios hormonales derivados de la falta de ciertos componentes en nuestro cuerpo, lo que altera e influye negativamente en el rendimiento físico e intelectual.

Desayunos ideales.

Escolares

Opción 1: Una taza de leche (o un yogur) con cereales y un jugo de frutas natural.

Opción 2: Una taza de café o té con leche más tres o cuatro galletitas (o dos tostadas) con mermelada de frutas y dos cucharadas de queso blanco o un trozo de queso fresco.

Opción 3: Una taza de leche chocolatada con dos o tres galletitas, o dos tostadas y una porción de queso blanco. Un jugo exprimido de fruta.

Adultos

Opción 1: Un jugo exprimido de fruta (o una fruta), té o café y dos tostadas con queso blanco o jamón. Puedes agregar 1 (o medio) yogur natural.

Opción 2: Fruta o un jugo exprimido, té o café con leche, tres galletitas con mermelada y una porción de queso blanco.

Opción 3: Una taza de leche con cereales (o en reemplazo de los cereales, dos tostadas) y un jugo exprimido de fruta.

Opción 4: Un jugo de fruta, una taza de té o café cortado con leche, dos tostadas, una lámina de jamón y 1 (o 1/2 ) huevo duro o pasado por agua. Puedes reemplazar la leche por 1/2 yogur natural.

Publicado el 10/04/12
Fuente: La Segunda