Experta advierte que la cirugía bariátrica no es mágica

Existe un porcentaje no despreciable de pacientes que empiezan a recuperar el peso luego de someterse a una operación.

Hace 59 años se realiza este procedimiento contra la obesidad. Sin embargo, en la actualidad se ha masificado y es considerada por muchos pacientes obesos como la solución definitiva a su problema.

Macarena Gullón, académica de la Escuela de Nutrición y Dietética de la U. Andrés Bello, indica que en los medios de comunicación como la T.V. las personas ven los sorprendentes y rápidos resultados que se obtienen al "corchetearse el estómago" como vulgarmente se conoce. Pero advierte que no es tan fácil como se ve.

"El paciente suele pensar que la operación es mágica y que bastará pasar por el quirófano y despertar de la anestesia para que nunca más deba preocuparse por su peso. La realidad, en cambio, es otra", asegura la nutricionista. Efectivamente, el paciente necesitará una asistencia de un equipo multidisciplinario por un tiempo prolongado, que incluye a su cirujano, nutricionista, nutriólogo, psicólogo y kinesiólogo.

"Esto es fundamental para el éxito del tratamiento, ya que entre el tercer y cuarto año de la operación existe un porcentaje no despreciable de pacientes que empiezan a recuperar el peso, al aumentar nuevamente el tamaño del estómago", detalla el profesional.

Por eso es tan importante, agrega la experta, que el individuo que decide operarse tenga conciencia que el tratamiento dietético no consiste en "comer de todo pero poco", sino en hacer un cambio profundo y definitivo de los malos hábitos alimentarios que lo han acompañado por tanto tiempo.

Indicaciones

Una vez que se realiza la operación, el paciente debe seguir las indicaciones en lo que se refiere a la alimentación. "Es un régimen líquido por 10 días, luego papilla por 3 semanas para luego pasar a un régimen picado, todos estos muy hipocalóricos", dice.

Hay alimentos prohibidos como todos aquellos que contengan azúcar (tortas, pasteles, chocolates, golosinas, etc.), grasa en exceso (frituras, mayonesa, crema, etc.) y que sean irritantes como el café, alcohol, ají, etc.

Los volúmenes son muy restringidos, comenzando por 50 ml.( ¼ de taza), cada hora en el post operatorio inmediato, hasta no más de 200 ml.( 1 taza) por vez. El fraccionamiento de la alimentación es de hasta 7 a 8 veces en el día. "Esto significa un cambio drástico para la mayoría de estos pacientes, acostumbrados a comer 3 veces diariamente e incluso solo 2. La alimentación se irá normalizando cuando haya bajado los kilos necesarios, pero siempre implicará un cambio total de los hábitos alimentarios", advierte.

Gullón agrega que la cirugía bariátrica puede ser extraordinariamente exitosa para un obeso que ha intentado muchas veces bajar de peso sin buenos resultados, y más todavía si tiene enfermedades asociadas como la diabetes, resistencia a la insulina, o hipertensión, pero debe saber a cabalidad la nueva vida que le espera y ser respetuoso del tratamiento que se le indicará.

Publicado el 09/05/12
Fuente: La Segunda