Neofobia alimentaria, repugnancia a conocer nuevos alimentos
Muchos niños de viven bajo la influencia de la neofobia alimentaria, es decir, no están dispuestos a conocer nuevos alimentos y repugnan abrir sus horizontes nutricionales por no estar expuestos en contadas ocasiones al sabor, textura, olores y formas de la gama de productos vegetales, animales e industrializados que el mundo les presenta.
La preferencia por determinados alimentos es un gusto que se crea desde la infancia, ya que desde esta etapa de la vida el ser humano comienza a familiarizarse y a adaptarse a todo tipo de cambios al comenzar a basar sus preferencias y gustos con base a su experiencia.
La neofobia es una respuesta normal y fisiológica de los niños y es superable con el paso del tiempo, luego de que el infante comience poco a poco a ver con naturalidad que los nuevos alimentos son parte de su crecimiento y que están incluidos en la dieta de sus padres, que al final son un factor determimante para las nuevas experiencias de sus vástagos.
Para que un niño salga de su "bloqueo" alimentario, es necesario.
1.- Exponerlo en repetida ocasiones a nuevos alimentos.
2.- Enseñarle los distintos grupos de alimentos que existen y variar sus comidas con éstos.
3.- Encontrar el mejor momento para presentarle los nuevos alimentos, es decir, cuando el pequeño tenga hambre, esté calmado y receptivo.
4.- La presentación de su plato contará mucho, pues el buscar una forma colorida y divertida le facilitará su ingesta a esos alimentos que antes desconocía, sobre todo hablando de verduras y legumbres.
5.- Explicarle las propiedades, colores, formas, textura y sabores de los nuevos alimentos es un arma poderosa para que su mente comience a asimilarlos. Hacer algunas comparaciones ayudaría.
Publicado el 04/10/12
Fuente: Terra