Hombres recurren a la cirugía para reducir el tamaño de sus mamas
La ginecomastia es un problema bastante común que puede convertirse en una verdadera pesadilla para quien lo sufre. Puede solucionarse con cirugía o liposucción.
"Desde que tenía 12 años empecé a sentirme incómodo con el tamaño de mis pezones, específicamente de la mancha areolar que era grande, flácida la mayor parte del tiempo y abultada. Sin embargo lo demás estaba bien. Yo culpaba al sobrepeso que tenía. Nunca fui capaz de ir a la piscina con mis amigos por temor a que los vieran, ni siquiera quitarme la polera enfrente de alguien. Pero nunca dije nada y creo que ese fue mi mayor error".
El testimonio es uno de los tantos que pueden encontrarse en páginas de Internet donde se habla de la ginecomastia o aumento anormal de la glándula mamaria en el hombre, un problema que puede afectar a entre un 40 y un 60% de la población masculina y que con el paso del tiempo puede llegar a convertirse en algo realmente molesto para quien lo padece sobre todo en el aspecto estético.
Según el cirujano plástico Roy Sothers, actualmente es más común que los hombres consulten por este problema, sobre todo porque poco a poco han ido perdiendo el miedo a hacerlo. Generalmente quienes se animan a recurrir a un especialista son adolescentes acompañados por sus padres, o bien adultos que han lidiado durante mucho tiempo con el tema y buscan una solución definitiva.
Daniel Jacubovsky, cirujano plástico de Clínica Las Condes, explica que existe una ginecomastia verdadera, en la que la glándula mamaria efectivamente aumenta de tamaño, y una pseudoginecomastia, que se produce por acumulación de grasa. Este último cuadro es el que se presenta con mayor frecuencia.
En el caso de la ginecomastia verdadera, las razones del crecimiento anormal de la glándula mamaria son diversas. El doctor Jacubovsky explica que éste se puede producir por un aumento del estrógeno en la sangre del hombre o bien por un alza del estradiol durante la adolescencia. "A algunos niños cuando están pasando por la pubertad, les crecen las glándulas, pero eso luego se normaliza", señala el médico.
Otra causa fisiológica de la ginecomastia verdadera es la disminución de la hormona masculina en los hombres de entre 55 y 60 años.
Sin embargo, el problema también puede tener otros orígenes. Puede ocurrir que por razones desconocidas el tamaño de la glándula aumente bruscamente, provocando una asimetría en el pecho masculino que puede producir muchas molestias. Asimismo, es posible que la glándula mamaria esté afectada por un cáncer que causa el aumento de tamaño. Y, finalmente, es posible que la ginecomastia sea originada por el consumo de determinados medicamentos. "Hay una lista muy larga de medicamentos que como efecto secundario pueden producir este problema (...) pero que cuando se suspenden se normaliza", explica Daniel Jacubovsky.
La ginecomastia verdadera y la pseudoginecomastia tienen distintos tratamientos. Si se trata de la primera, Roy Sothers afirma que el procedimiento a seguir es la resección de la glándula mamaria a través de una cirugía tradicional, en la que se realiza una incisión alrededor de la areola. "Se produce un poco de edema, hinchazón durante los primeros días, poco dolor, pero en general es muy bien tolerada", describe.
Daniel Jacubovsky agrega que la intervención generalmente se realiza con anestesia general y el paciente queda hospitalizado medio día o un día. "La operación invalida por un par de días y por alrededor de tres semanas para hacer deporte", puntualiza el cirujano plástico de Clínica Las Condes.
En el caso de la pseudoginecomastia, la mejor de las soluciones -según Roy Sothers- continúa siendo la liposucción. "Es una cirugía que a pesar de dejar incisiones muy pequeñas que apenas se ven después, por dentro es un verdadero raspado que hacemos bajo la piel para poder sacar la grasa y eso genera una herida mucho más grande que no se ve, pero que evidentemente se siente", indica el especialista.
Por esta razón, este procedimiento causa mayor inflamación y dolor, y además genera hematomas. "Eso en promedio dura más o menos dos semanas en forma importante y después para tratar de lograr el mejor resultado estético hay que hacer masajes de drenaje linfático y el paciente debe usar una faja elasticada durante un buen tiempo", añade el cirujano plástico.
Eso sí, tanto en el caso de la cirugía como en el de la liposucción, los resultados son definitivos y las mamas no vuelven a crecer. "A las personas que les hacemos liposucción no les sacamos grasa suelta, sino que le sacamos un volumen importante de las células que juntan la grasa y ésas después ya no se reproducen, por lo tanto el resultado es estable", explica Sothers.
Daniel Jacubovsky sostiene que cualquier hombre afectado por un crecimiento anormal de las mamas puede someterse a alguna de las dos intervenciones. El único requisito es encontrarse en buenas condiciones de salud. En caso de sufrir alguna patología, como diabetes o hipertensión, ésta debe estar controlada.
Publicado el 26/11/11
Fuente: Emol - Tendencias y Mujer
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