La dieta mediterránea no logra imponerse entre los chilenos
Comemos poco pescado, legumbres, frutas y verduras, y en cambio consumimos mucha azúcar.
Diversos estudios han demostrado que la dieta mediterránea protege de las enfermedades crónicas, y permite a las personas vivir más y mejor. Por lo mismo fue declarada en 2010 Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad. Se trata de un régimen mayormente consumido en países como España, Italia y Grecia, donde hay una baja incidencia de enfermedades cardiovasculares y un incremento en la expectativa de vida de la población.
En términos generales, la dieta mediterránea privilegia alimentos como el aceite de oliva y/o canola, el pescado, las legumbres, los cereales integrales, los frutos secos, y las frutas y verduras, entre otros.
A pesar de los reconocidos beneficios para la salud que tiene, la dieta mediterránea no ha logrado imponerse entre los chilenos, como lo demuestra el segundo reporte del Índice Aliméntate Sano, elaborado por el Centro de Nutrición Molecular y Enfermedades Crónicas de la Pontifica Universidad Católica de Chile (CNMEC). Los resultados del informe, que fueron dados a conocer hoy, se basan en el análisis de 30 mil usuarios chilenos registrados en Fitbook, una herramienta gratuita de autoevaluación disponible en www.alimentatesano.cl.
Según el estudio, resulta alarmante el poco consumo de pescado entre los chilenos, ya que sólo un 5% come productos del mar más de dos veces a la semana -como se recomienda-, mientras que un 51% afirma hacerlo menos de una vez por semana.
En el caso de las legumbres, si la dosis recomendada es más de dos veces a la semana, sólo un 10% cumple con ese valor.
En cuanto a las frutas y verduras, el reporte revela que un 27% no consume fruta todos los días y que un 83% come verduras en porciones menores a lo que recomienda la dieta mediterránea, esto es tres o más porciones al día.
Con los cereales integrales ocurre algo parecido: un 76% asegura no consumirlos en la cantidad recomendada: dos o más porciones al día.
Asimismo, los resultados del reporte dejan en evidencia que los chilenos somos aficionados por lo dulce. De esta forma, un 60% de los adultos que se autoevaluaron en Fitbook consume mucha azúcar o más alimentos azucarados que lo recomendado, mientras que un 40% los consume con moderación.
Consecuencias para la salud
Tomando en cuenta todos estos resultados, el Índice Aliméntate Sano 2011 concluyó que sólo un 11% de la población se alimenta de manera saludable lo que, según Federico Leighton, director del CNMEC, resulta riesgoso en cuanto a la aparición y propagación del llamado Síndrome Metabólico, el cual es la antesala de enfermedades crónicas como las cardiovasculares, cáncer, diabetes y obesidad.
Más de 2.000 usuarios registrados en Fitbook han completado sus datos de síndrome metabólico y de ellos se desprende que un 25% de los chilenos presenta esta condición de riesgo. Llama la atención que en el grupo de las personas de entre 20 y 30 años, una de cada seis reprueba la "revisión técnica".
"Que gente joven presente a esas alturas Síndrome metabólico es preocupante. Debiera extrañarnos que mujeres u hombres de 25 años tengan la glicemia o la presión arterial elevadas, Más sorprendente aún es que sumen tres componentes de riesgo fuera de los valores normales", comentó el doctor Leighton.
Al analizar en detalle cada uno de los componentes de riesgo del Síndrome Metabólico, los resultados revelan que un 45% de los chilenos presenta presión arterial elevada, el mismo porcentaje tiene un perímetro abdominal aumentado, un 40% registra glicemia alta, un 35% tiene triglicéridos elevados y un 29% presenta el colesterol HDL o colesterol "bueno" disminuido.
Entre los adultos jóvenes de 20 a 30 años, uno de cada tres tiene la presión arterial sobre los valores prudentes y uno de cada cuatro tiene la glicemia elevada.
"Esto no es genético, es la consecuencia de los hábitos o estilo de vida actuales", concluyó el médico.
Publicado el 06/12/11
Fuente: Emol - Tendencias y Mujer
Contacto: contactenos@adelgace.cl
Celular: +569 7497 6497 / Santiago de Chile