Explican la importancia de estar hidratados
No sólo para hacer deporte , sino como parte fundamental de los procesos biológicos.
Estamos ad portas de la primavera, el sol ya aparece todos los días para iluminar nuestras casas, oficinas y nuestra vida. ¡Por fin!, dirán algunos. Y es que el frío nos tenía a todos un poco deprimidos, con las ganas de sacar luego del clóset nuestra polera favorita.
Pero como no todo es felicidad, ahora nos damos cuenta de que tenemos que bajar todos esos kilitos que ganamos comiendo chocolates, cazuela y cuanto comida se nos ocurrió comprar para combatir el frío. Tenemos que lucir ese traje de baño y con lo que subimos durante el invierno, esa tarea parece imposible.
Hablamos con un nutricionista para que nos guiara en nuestra cruzada por el verano y nos contó que lo mejor es planear y adoptar una alimentación saludable y una rutina de ejercicios que más nos acomode. Puede ser en el gimnasio, con una amiga, en nuestra casa, etc. Lo importante es que seamos constantes y tengamos nuestro objetivo claro.
Luego de elegir una actividad entretenida según los gustos personales, en un espacio acogedor, con más personas o al aire libre, "se debe incorporar progresivamente la actividad física, permitiendo que nuestros sistemas biológicos se adapten a esta nueva carga de trabajo", cuenta Juan Tejo, nutricionista del CAR y de la Universidad Bernardo O'Higgins.
Si ha pasado mucho tiempo desde que no movemos nuestro cuerpo, podríamos empezar con una rutina de media hora. Aún así, Tejo señala que "lo mínimo es 1 hora, 3 veces a la semana si se quieren ver buenos resultados".
Hidratación, un factor importantísimo cuando retomamos el ejercicio
La hidratación es un punto vital, no sólo cuando volvemos al gimnasio, sino que también en nuestra vida diaria. "Muchas veces no se le da mucha importancia, pero la verdad es que el nivel del agua en el organismo controla la temperatura corporal y varios procesos biológicos", nos aclara Juan Tejo.
El problema es que, por diferentes motivos, no siempre podemos comprar agua embotellada. En este caso, Juan Tejo nos a conseja consumir alimentos que la aporten, como jugos, frutas, sopas, té de hierbas sin grasa ni azúcar extra, hasta completar entre 2 a 3 litros, así "se asegurará un buen funcionamiento de órganos y células, y como consecuencia mejorará el ánimo, no habrá tantas cefaleas, se acelera el tránsito intestinal y mejora la piel, entre otras cosas".
Pero además de cuidar la hidratación diariamente, mayor atención debemos ponerle cuando hacemos ejercicio. Tejo nos advierte tener cuidado de no tener sed, ya que indica algún grado de deshidratación.
"Cuando esto ocurre, disminuye la capacidad de trabajo y, por ende, no se quema tanta grasa y calorías como se quisiera", aclara el nutricionista.
Para evitar la deshidratación lo ideal es ingerir de forma regular pequeñas cantidades de agua, jugos o bebidas isotónicas. Juan Tejo nos cuenta que estas últimas tienen la ventaja, pues tienen una concentración y cantidad de vitaminas y minerales que favorecen la rehidratación. "En Finlandia han innovado mucho en este sentido, mezclando los beneficios de las energéticas e isotónicas, las que incluso aumentan la recuperación y dan energía, porque aportan cafeína y vitaminas del complejo B, lo que favorece la utilización de la grasa durante el ejercicio, otorgando un mejor rendimiento deportivo", señala el profesional.
Lo importante es tomar conciencia de la importancia que tiene la hidratación para el buen funcionamiento de nuestro cuerpo, permitiéndonos realizar todas las tareas diarias, incluso las que nos permitirán lucir perfectamente el traje de baño en unos meses más.
Publicado el 03/08/11
Fuente: La Segunda
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