Es una de las primerísimas fuentes de obesidad e inflamación. Se trata de un problema poco conocido aun en algunos paises, pero las investigaciones en este sentido se desarrollan rápidamente.
Puede considerarse prometedor en numerosos casos de afecciones crónicas, sobre todo para los problemas alérgicos, nerviosos, agotamiento, estrés, obesidad, etc.
En realidad en vez de alergia alimentaria, sería más acertado hablar de SENSIBILIDAD ALIMENTARIA. Se trata de una alergia mucho más difícil de identificar, que puede provocar síntomas muy variados y ser motivada por cualquier alimento y que afecta a más del 80% de la población de nuestra cultura del bienestar.
El mecanismo de la alergia, o más bien de la SENSIBILIDAD ALIMENTARIA, es bastante parecido al de la droga pero en un nivel menor, naturalmente. Son alimentos que consumimos diaria o casi diariamente y de los que no podremos prescindir sin sentir síntomas psíquicos de cansancio, irritabilidad, ansiedad, nerviosismo.
Estos síntomas de irritabilidad, cansancio, ansiedad, nerviosismo, desaparecen en cuanto volvemos a comer el alimento al cual somos sensibles. Se crea así un círculo vicioso de alergia-adicción. El ejemplo más conocido es el del café, pero puede ocurrir lo mismo con cualquier otro alimento que consumamos diariamente ( leche de vaca y sus productos lácteos, cacaos, azúcar, trigo sus derivados, sal, azúcar, vinos, licores, etc.
De hecho, se produce una relación de dependencia entre nuestro organismo y un alimento dado, al cual éste es particularmente sensible, y dicho alimento induce diversas reacciones a todos los niveles del organismo, especialmente a nivel cerebral-(alergia cerebral)-. Se observó que esta sensibilidad alimentaria puede ser causante de problemas de depresión, cansancio crónico, dificultades para concentrarse, jaquecas, así como también asmas, bronquitis, ezcema, psoriasis, urticaria, acné, malas digestiones, elevación o bajada de presión, dolores y debilidad muscular, transtornos reumáticos, problemas ginecológicos, anemia, pérdidas de calcio, pérdida de proteinas, y un largo etcétera.
Una alergia de este tipo puede también causar un aumento de peso desmedido debido a la retención de líquido asociada al fenómeno alérgico.
Al identificar el alimento culpable y eliminarlo de la alimentación se accede, después de una agravación de unos días, a la desaparición de los síntomas.
Diagnóstico por la gota de sangre
Consiste en extraer una gota de sangre y subdividirla en cinco gotas sobre un cristal porta, se deja secar, -de cinco a diez minutos - y se procede a leer las cinco gotitas, ya secas, con ayuda de un microscopio.
En personas sanas las gotas coagulan haciendo las mismas formas, digamos que hay un patrón fijo en personas sanas.
En personas enfermas las gotas adoptarán figuras y colores diferentes.
En mi práctica habitual, cuando una persona acude a mi consulta para adelgazar, lo primero que hago es extraer la gota de sangre, la dejo secar mientras comentamos detalles de su problema. Al cabo de diez minutos aplico mis ojos al microscopio y procedo a la lectura de las gotitas. Se puede observar, con esta práctica, que el 90% de las personas que desean adelgazar padecen de alergia alimentaria - la sangre, ya seca, tiene una espuma blanca que indica que el Ph sanguíneo es ácido, que hay falta de calcio, falta de hierro, deficiencia de grupo Vit.B, falta de proteína, por lo cual el organismo tenderá a retener líquidos, a inflamar en zonas o en su totalidad, y a padecer de enfermedades nerviosas de diversos tipos. Estas personas, no importa que edad tengan, por regla general, son comedores de harinas de trigo, lácteos de todo tipo, azúcares y derivados, cacaos, cafés y derivados, bebidas industriales o alcohólicas. No se asuste, no olvide que estoy tratando de enseñarle, no a comer, sino a nutrirse. La publicidad alimentaria nos engaña para que consumamos de sus alimentos con el señuelo del calcio, vitaminas, vigor, etc., y a partir de ahí empieza nuestra tragedia en forma de obesidad.
También se puede observar con esta práctica si la persona que te consulta padece, y desde cuando, de algún tipo de angustia o ansiedad que le obligue al picoteo incesante de diversos alimentos - dulces o salados o todo tipo de sabores - y por este motivo a la obesidad. Las gotas FINISPETIT y TRANQUIL en comprimidos, están indicadas para este tipo de problemas ansiosos y nerviosos.
Gracias a este tipo de diagnóstico se puede realizar un tratamiento muy preciso que conduzca a la persona que consulta hacia sus metas de adelgazamiento y salud. Se sabrá que gotas administrar y si es necesario aportar vitaminas que necesite la persona. Este tipo de diagnóstico también se utiliza para detectar otros tipos de enfermedad como artritis, asma, jaquecas, osteoporosis, enfermedades ginecológicas, cáncer, etc.
Fuente: http://www.asturnat.com