Al igual que la dieta mediterránea, la alimentación básica de Japón, se compone de alimentos muy saludables que son responsables de las bajas tasas de sobrepeso, obesidad y otras patologías de sus habitantes.
Asimismo, los japoneses forman parte de grupos más longevos del mundo y ésto se atribuye, fundamentalmente a su alimentación.
La cocina japonesa consigue una dieta sana y equilibrada debido a que incluye como su base arroz, pescado, algas, verduras y derivados de la soja.
Se caracteriza por incluir una gran variedad de alimentos que pueden llegar a los 30 de diferente tipo en un sólo día, pero se consumen combinados en sus platos y en pequeñas proporciones.
Las calorías de la dieta japonesa no supera las 2300 calorías por día en los hombres y entre las mujeres llega a las 1950.
El 63% de dichas calorías son representadas por los carbohidratos, mientras que las proteínas constituyen el 12% y las grasas el 25% del aporte energético total.
Los productos usados habitualmente para la cocina japonesa, como son las algas, el té verde, verduras y derivados de la soja son fuente de antioxidantes, vitaminas y minerales.
Esta composición que se extiende a la alimentación japonesa aporta también, grasas insaturadas y fitoesteroles que protegen al corazón y los vasos sanguíneos de nuestro organismo.
La dieta japonesa sin duda puede ser una guía para nosotros que contribuye al descenso de los índices de sobrepeso, obesidad y demás enfermedades metabólicas que incrementan el riesgo cardiovascular.
Para semejar nuestra dieta un poco más a la japonesa y ganar en salud deberíamos empezar por consumir más pescado, verduras, arroz y productos de origen vegetal como el tofú u otros alimentos a base de soja.
Además, la bebida principal en Japón es el agua y el té verde, característica muy distante de la nuestra.
La calidad y la cantidad de la alimentación japonesa son una excelente combinación que permite a sus seguidores ganar en salud y longevidad. Beneficios que a muchos de nosotros nos invitan a imitar, aunque sea, los rasgos básicos de su dieta habitual.