Los refrescos engordan

Una campaña para disminuir el consumo de bebidas gaseosas entre estudiantes primarios resultó efectiva para reducir la obesidad infantil, según un reciente estudio. Mientras Francia eliminó las máquinas vendedoras de bebidas azucaradas y carbonatadas en los colegios, en Inglaterra crece un movimiento contra estos refrescos. Un reciente estudio, con el auspicio de The British Medical Journal en su página web, señala que la eliminación de los refrescos en escuelas básicas -tanto azucarados como dietéticos-, demostró una disminución de los porcentajes de niños con sobrepeso y obesos. La diferencia se notó incluso con la disminución de consumo de menos de una lata diaria. La investigación incluyó a 644 niños de entre 7 y 11 años. El porcentaje de sobrepreso aumentó en un 7,5 por ciento en el grupo que mantuvo su consumo de gaseosas y fue de sólo un 0,2 por ciento entre los que lo redujeron.

Un equipo de Harvard explicó en la revista médica “The Lancet” que este tipo de bebidas azucaradas no son registradas por el cerebro del mismo modo que los alimentos azucarados. El cerebro parece confundirse con las calorías de estos líquidos dulces que pasan rápidamente por el estómago y al parecer no activan la sensación de saciedad que en cambio producen los alimentos dulces. En este caso, el estómago no avisa al cerebro que detenga el consumo o consuma menos. Y esto es lo que engorda.

Investigaciones de los años 70 en Estados Unidos relacionaron el daño dental con el consumo de refrescos, con similares efectos observados desde Suecia hasta Irak. Sin embargo, ese efecto disminuyó, tal vez por la fluoración del agua o incluso por fenómenos genéticos.

En los últimos 25 años este tipo de bebidas preocupó también debido a que el fósforo, ingrediente común en las gaseosas, frena la absorción de calcio en los huesos, fenómeno que ocurre principalmente en la adolescencia. Y en casos de osteoporosis cuando se es adulto, el reemplazo de los refrescos por leche, agua o jugos de fruta puede ser muy tardío.

Domingo 25 de abril de 2004

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