Un
paso científico clave en la lucha contra la obesidad
fue dado a conocer ayer por investigadores europeos.
La eventual panacéa contra la gordura apunta
a una proteína llamada retinoblastoma, cuya presencia
en los tejidos determina la obesidad.
Según explicó Saverio Cinti, de la Sociedad
Italiana para el estudio de la obesidad "si la
retinoblastoma está presente en el tejido adiposo,
éste se vuelve blanco, acumula energía
y aparece en el físico como gordura.
En cambio, si no está, el tejido se pone marrón
y pasa a quemar grasas". Por lo tanto, controlando
la presencia de esta proteína se puede limitar
también la obesidad.
Diario Las Ultimas Noticias
Jueves 18 de marzo de 2004
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