No
es cierto que la gordura sea parte de la hermosura
ni que los gordos sean felices, asegura el alcalde
de Valparaíso, Hernán Pinto.
Su
triste experiencia de haber sufrido de obesidad mórbida
lo motivó a crear un programa para ayudar
a obesos, sin costo para ellos. Así, el edil
busca que esas personas puedan volver a ser felices,
como asegura que él lo es ahora tras bajar
72 kilos de peso, luego de haberse sometido a una
intervención quirúrgica (bypass gástrico).
Su tarea es reducir otros 10 kilos.
La
solución a su caso llevó a muchos gordos
y gordas a pedirle ayuda. Así surgió el
plan piloto del municipio porteño que cuenta
ya con 300 inscritos. De ellos, el 90% son mujeres.
Diario El Mercurio
Sábado 24 de abril de 2004 |