El alcalde de Río de Janeiro prohibió la exhibición de anuncios publicitarios de cigarrillos, bebidas alcohólicas, gaseosas y alimentos en las vías públicas cercanas a las escuelas públicas y privadas, como una forma de ’’combatir la obesidad’’ y los ’’malos hábitos alimenticios de la población’’.

El alcalde César Maia decidió entablar una ’’cruzada’’ contra la obesidad y los malos hábitos alimenticios de los cariocas, a través del decreto número 23.995, que impuso un plazo de 75 días, a contar desde el lunes, a todos los anunciantes y comerciantes que ostenten propagandas de cigarrillos, bebidas alcohólicas y alimentos en un radio de 200 metros de distancia de edificios públicos del municipio, a retirar sus avisos.

Para justificar la medida, Maia consideró que ’’la decisión apunta a estimular hábitos saludables, teniendo en cuenta entre otros datos, el reciente informe de la Organización Mundial de la Salud (OMS) que denunció la epidemia mundial de obesidad en adultos y niños, las enfermedades cardiovasculares, la diabetes tipo 2 y algunas formas de cáncer como males inducidos por mala nutrición’’.

’’Río está enfrentando el combate a la obesidad al mismo tiempo y del mismo modo que los países desarrollados, donde la protección a los ciudadanos es mucho más avanzada’’, explicó hoy a la prensa el alcalde, quien determinó además que pasado el término fijado en el decreto, estará prohibida la exhibición de ese tipo publicidad en cercanías de establecimientos educativos y comedores populares.

La primera reacción adversa a la medida, vino de parte del Sindicato de Hoteles, Restaurantes y Bares de Río de Janeiro, cuyo director de administración sindical, Sidney Pereira Júnior, adelantó que será realizado un relevamiento para saber ’’qué establecimientos comerciales y edificios’’ están contemplados en el decreto.

Tras ese informe, el sindicato se reunirá con César Maia y si la ’’charla no nos convence, iremos ante la Justicia para intentar anular el decreto’’, aseguró el sindicalista.

El alcalde de Río, que en el 2002 prohibió con un decreto la venta de gaseosas y alimentos tipo ’’fast-food’’ en las escuelas municipales, también tendrá que resolver si la medida alcanzará a multinacionales de bebidas, cigarrillos y de alimentación, patrocinadoras tradicionales de eventos deportivos, como los próximos Juegos Panamericanos que tendrán como sede a la ciudad, y que seguramente querrán exhibir sus avisos en los estadios y locales municipales donde se desarrollarán las competencias

Diario Las Ultimas Noticias // Ansa

Martes 2 de marzo de 2004