La
Paz.- La policía ha decidido marginar de las
tareas más exigentes a los agentes gordos
y destinarlos a tareas administrativas, pese a la
oposición de la Defensoría del Pueblo,
se informó el miércoles.
El
comandante de la policía de La Paz, coronel
Guido Arandia, declaró al diario La Razón
que la medida responde a que en la prensa se ha ridiculizado
recientemente la falta de condiciones atléticas
de algunos efectivos.
Ante
la observación de la Defensoría del
Pueblo de que se trataba de una disposición
discriminatoria y dudas sobre el rigor de su cumplimiento,
Arandia respondió que ’’así de
terminante y claro es el memorándum’’ y
que ’’no es discriminación ni
una forma de echarlos’’.
’’Se trata de concientizar a la gente para que tenga condiciones
físicas aptas para cumplir su trabajo’’, prosiguió.
El
director de Comunicación Social de la Policía,
coronel Miguel Vásquez, agregó que ’’el
criterio es que la gente que viste uniforme tiene
que ser metódica sobre el aspecto físico’’.
’’ No podemos observar a uniformados que no guarden una figura estética
que implique respeto de parte de la ciudadanía’’, sostuvo.
El Comando Nacional abrió, no obstante, un compás de espera para
que los uniformados excedidos de peso se presenten a la Dirección de Salud
y Bienestar Social de la Policía para que allí se evalúe
si su estado físico obedece a falta de templanza o a alguna patología.
’’ Una vez conocidos los problemas se podrá actuar en cada
caso, dependiendo de su estado de salud, para que se ponga en forma (el policía)’’,
señaló Arandia. La policía tiene alrededor de 22.000 efectivos,
entre hombres y mujeres, de los que 4.000 son oficiales.
Vásquez
indicó que no se tiene certeza de cuantos
agentes con sobrepeso prestan servicios, pero aclaró que
la mayor parte de ellos se encuentra en el departamento
(provincia) de Cochabamba, conocido por la afición
de sus pobladores a la buena y abundante mesa.
También
indicó que entre los agentes más voluminosos
se encuentran los del departamento de Santa Cruz,
al sureste de La Paz, principal centro de producción
de alimentos del país.
Los jefes policiales dijeron que la medida de poner a régimen a los
agentes obesos obedece a los comentarios sarcásticos entre la ciudadanía
que siguieron a la transmisión de imágenes de varios partidos
de fútbol accidentados, en los últimos meses, donde los uniformados
tenían problemas por su falta de forma para perseguir a hinchas descontrolados.
Los
reglamentos policiales indican que los aspirantes
a ingresar a la fuerza no podrán tener menos
de 1,70 metros de altura y que, en ese caso, su peso
máximo no será mayor a 78 kilos, dependiendo
de su contextura.
Miércoles 28 de abril de 2004
AP
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