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Unidos para ayudar a los obesos :

En Chile se estima que existen 160 mil obesos mórbidos, sin embargo, en 2003 sólo 600 pudieron acceder a una cirugía. La creación de la Corporación Baros busca captar fondos para tratar quirúrgicamente a pacientes sin recursos. Con 124 kilos y un índice de masa corporal (IMC) de 51, María Eugenia Arce (23) sabe que su única salida es un Bypass.

"Egresaré de parvularia y sé que me discriminarán al buscar trabajo. Las "tías" tienen que ser ágiles y enseñar hábitos alimentarios sanos, pero yo con qué moral lo voy a hacer".

Con toda esa impotencia y sin encontrar especialistas que la ayudasen en su ciudad (Concepción), viajó a Santiago para ver la opción de operarse. Acá, sin embargo, se topó con la primera barrera: los 7 a 9 millones de pesos que costaría la intervención.

"Mi familia es de clase media y no tenemos de dónde sacar otro sueldo para costearla. Si ni siquiera tenemos casa propia".

Selección de candidatos

Como la mayoría de los 160 mil obesos mórbidos que hay en Chile, María Eugenia no tiene medios para ponerle fin a su mal; por eso, tiene todas sus esperanzas puestas en una nueva iniciativa que impulsa un grupo de médicos cirujanos y nutriólogos y otros profesionales del país: la Corporación Baros.

Su meta es permitir que personas de escasos recursos accedan a un tratamiento quirúrgico definitivo contra la obesidad mórbida (Bypass o Banding), para lo cual canalizarán fondos de municipalidades y privados.

Los alcaldes de Valparaíso, Lo Barnechea, Maipú, Puente Alto, Renca y San Bernardo son los primeros en adherirse a la causa.

Su anhelo es tener al primer paciente operado el 15 de junio y, en el semestre, de 4 a 6 por mes.

"Así como nació Conin hace 30 años, Baros busca paliar y ser un referente en el actual problema de salud pública, que ya no es la desnutrición, sino la obesidad mórbida", afirma el especialista en cirugía de obesidad de Clínica Las Condes y presidente de Baros, doctor Marcos Berry.

La selección de candidatos la realizarán las municipalidades asociadas a la corporación, a través de una evaluación hecha por una enfermera, una asistente social y una nutricionista. El tratamiento será gratuito para las personas, quienes podrán atenderse en clínicas reconocidas y hospitales institucionales; aunque no se descarta que algunas puedan cancelar un pequeño copago.

A juicio de Berry, ésta es una acción complementaria a las anunciadas por Fonasa (el tratamiento integral para 240 personas con sobrepeso), pues desea resolver el problema a quienes han fracasado en otras terapias, con un IMC mayor a 40 o sobre 35 con patología asociada.

En este tipo de procedimientos quirúrgicos, los pacientes deben tener un adecuado seguimiento posterior con un equipo multidisciplinario. De hecho, en Estados Unidos, las cirugías bariátricas se han expandido y entre las casi 140 mil que se hacen cada año ya se notan ciertos relajos en la rigurosidad médica y más de un caso con secuelas graves.

"Por eso, nuestra idea es que las municipalidades no sólo se comprometan con dinero, sino también con tener profesionales capacitados para hacer el seguimiento a los pacientes. Ahora, si en el futuro aumentara mucho el volumen de cirugías y se requiere abrir un centro especializado para realizar ese seguimiento, tendremos que hacerlo".

Diario El Mercurio

Sábado 15 de mayo de 2004