En la mesa el sabor lo pone el ketchup. En los últimos
años este producto se ha convertido en uno
de los aderezos preferidos de las personas y ha
ido conquistando nuevos paladares a pasos agigantados.
Si bien en esta categoría la mayonesa es
la que manda, el ketchup ha ganado protagonismo
y, por su explosivo crecimiento, toda la atención
está puesta en él.
Alfredo Gantz, brand manager de Unilever, compañía
líder del mercado, que maneja las marcas
Hellmann’s, Malloa y JB, cuenta que “lo
que vemos es un desarrollo muy rápido, un
crecimiento que se da a tasas de dos dígitos
en volumen”. Los factores que explican este
panorama, según el ejecutivo, son en parte
el aumento en el poder adquisitivo de las personas
y también sus hábitos de comida, que
se han vuelto más refinados. |
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“A la gente cada vez le
gusta comer más rico
y en el caso de los niños y adolescentes entre
9 y 16 años, que son nuestros consumidores principales,
esto es algo relevante. Con ellos el ketchup cumple
dos roles, hace las comidas mucho más entretenidas,
porque las pinta, y les da un sabor a tomate que les
encanta”.
Julio Ananías, subgerente
de márketing de Watts, explica el crecimiento
sobre el diez por ciento anual por el fuerte hábito
de consumo de los niños y por la buena sintonía
que este producto ha logrado también con las
madres. “Los menores lo consumen porque es rico
y la mamá lo compra porque “arregla”
las comidas, hace que ellos coman cosas que no les gustan
mucho. Lo que tenemos entonces es una combinación
súper potente que trae este desarrollo”.
Uno de los grandes elementos diferenciadores
de cada marca es su sabor. Como explica Alfredo Gantz,
todos los productos que tiene la compañía
están elaborados con fórmulas distintas.
En el caso de Malloa “se trata de una fórmula
que es más aliñada, tiene pimienta, es
algo espesa y en la que se siente el concentrado de
tomate un poco más fuerte. Se podría decir
de esta marca que es un poco más premium que
los otros productos que tenemos, es para paladares un
poco más refinados”.
El ejecutivo agrega que el sabor
de Hellmann’s es más dulce y que está
pensado para cautivar a un consumidor joven, al que
le gustan precisamente las cosas un poco más
dulces. “En cuanto a JB estamos frente a una marca
de precio, dirigida a consumidores que no pueden comprar
Malloa o Hellmann’s. Sus estándares de
calidad son súper altos y su fórmula tiene
todas las cosas que debe tener un ketchup, la única
diferencia es que es más barato”.
En Watts tiene una opinión
similar. Julio Ananías comenta que cada marca
tiene un sabor base que se mantiene en el tiempo, “éstas
sin embargo han ido sacando innovaciones que se desvían
un poco de él”.
Más rico y más
sano
El comer más rico y más
sano son dos grandes tendencias que se perciben en los
consumidores y que se ven reflejadas en los nuevos productos
que han salido en el último tiempo al mercado.
En el caso de Hellmann’s, en agosto del año
pasado se lanzó el Ketchup Barbeque, cuyos resultados
de venta tienen muy conforme a la compañía.
Su brand manager explica que con
él quisieron capturar una realidad muy relevante
dentro del mercado y del estilo de alimentación.
“Muchas cadenas de comida han ido metiendo el
concepto de preparar algunas platos con salsa de barbeque
y nosotros, mirando esto, dijimos por qué no
capitalizarlo y lanzar un ketchup sabor. Se trata de
un producto que no difiere en nada a esta salsa porque
ella está hecha en base a concentrado de tomate
al igual que el ketchup. Podríamos decir que
nuestro producto es una salsa implementada para un paladar
chileno y que se puede usar frío, tibio o caliente.
Sirve por ejemplo para marinar carnes, para comerlo
con arroz o con papas fritas”.
-Si lo definen como una salsa,
¿por qué meterlo dentro de la categoría
ketchup?
-Nosotros le llamamos ketchup
por un tema de simplicidad y también por la ubicación
en góndola. Lo que pasa es que si una persona
va a comprar salsas por lo general ellas están
en la parte baja de las góndolas, casi nadie
las ve y más encima se asocian a un producto
que es súper caro por el hecho de ser importadas.
En el caso de Watts el camino
que ha seguido con sus innovaciones tiene que ver con
la salud. Esta compañía sacó hace
un año y medio el primer -y único hasta
hoy- ketchup light. “Su principal característica
es que no contiene nada de azúcar y que tiene
un 60% menos de calorías que el resto de los
productos. Con él solucionamos problemas para
los diabéticos y también contribuimos
a enfrentar el tema de la obesidad infantil, sobre todo
pensando que los niños son los principales consumidores”,
dice Julio Ananías.
-En general los productos light
representan entre un diez y un quince por ciento de
las ventas totales de la categoría a la que pertenecen.
¿En este caso es así?
-En este caso se mantiene en la
parte baja de estos porcentajes, un diez por ciento
aproximadamente, porque somos los únicos que
lo trabajamos. Lo que pasa es que cuando entra la competencia
por lo general se produce un ruido adicional y eso hace
crecer el mercado entero.
Ninguna de las marcas de Unilever
tienen una variedad light y tampoco piensan tenerlas,
tal como comenta su brand manager. Gantz dice que “según
nuestro punto de vista y a diferencia de otros productos,
en el caso de los ketchup no vemos una concepción
negativa o que haya evidencia de que se trate de algo
hipercalórico. Todo lo contrario, estamos hablando
de un producto que es súper natural y que tiene
todas las propiedades del tomate”.
Si bien en este punto los ejecutivos
no están de acuerdo, en lo que sí coinciden
es en decir que dentro de la gran variedad de formatos
que existen en el comercio el de 100 gramos es el de
mayor demanda en el canal tradicional. Las personas
que frecuentan negocios como almacenes o minimarkets
por lo general tienen menos plata para comprar y buscan
llevar a la casa la mayor cantidad de productos. Este
envase les permite acceder a las distintas marcas a
un precio conveniente.
Con respecto al futuro del ketchup,
ambas compañías concuerdan también
en que su desarrollo debería continuar. Alfredo
Gantz dice que “esta es una categoría súper
chica dentro del mundo del aderezo y tiene un potencial
tremendo de crecimiento. Este es un tema de hábito,
de empezar a usarlo más, por ahí se percibe
que va el desarrollo”.
Julio Ananías comenta
que “si se mira las frecuencias de consumo y la
penetración en hogares se percibe que todavía
hay espacios para crecer. La mayonesa tiene una penetración
sobre el 90% y acá todavía todavía
tenemos un par de decenas de puntos por crecer, sólo
por el hecho de entrar a los hogares que hoy no están
consumiéndolo”.
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Lunes
31 de enero de 2005 |
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