La cantidad de grasa acumulada alrededor de los órganos abdominales afectaría las probabilidades de recurrencia del cáncer hepático luego del tratamiento, indicaron investigadores japoneses.

El doctor H. Yoshida, de la Universidad de Tokio, y colegas llegaron a esta conclusión después de realizar un seguimiento sobre 62 pacientes que se habían sometido a terapia por cáncer de hígado.

Del total de participantes, 27 fueron clasificados como con cantidades elevadas de la llamada grasa "visceral", mientras que los otros 35 presentaban un bajo nivel.

Luego de un año, la tasa de recurrencia fue del 15,9 por ciento en el grupo con mucha grasa visceral, comparado con el 9,7 por ciento en el resto de los pacientes.

Después de tres años, las tasas eran del 75,1 y el 43,1 por ciento, respectivamente, informó el equipo en la revista Gut.

Durante el período de observación, se registraron 14 muertes, nueve de las cuales se debieron a avances del cáncer de hígado. No obstante, no hubo una diferencia significativa en la supervivencia entre ambos grupos.

En tanto, concluyeron los autores, "aún debe observarse" si disminuir los niveles de grasa abdominal reduce las posibilidades de que el cáncer hepático reaparezca.

FUENTE: Gut, junio del 2009

Reuters Health

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